-Aunque
vaya como una mierda, la pelota más reluciente del saco será la preferida a
primera vista. A la tercera patada el jugador experto volverá a pedir el balón
descosido y humilde y con carita de no haber roto nunca ningún “Pato” (bonito
juego de palabras referido al jugador de fama internacional, y tan a gustico
que se queda uno).
-La
sordera de algunos se incrementa cuando el entrenador pronuncia aquello de “a
la próxima cambio”. El oído se
recuperará inmediatamente si la chica/chico más buenorro de la grada expresa
con un susurro su deseo de que el pseudosordo le dedique un gol.
-¿Qué
tendrán que ver la cocacola, la laca y el esparadrapo? Aparte de que ambos
sirven para intentar que la bota no resbale en según que campos, hubo una vez
un señor que fue a comprar una cocacola e iba con un pote de laca en la mano.
Le preguntaron para qué era la laca y él sólo acertó a responder que la laca
era para su amigo. Su amigo se llamaba Drapo. “Es para Drapo”, decía.
-¿Menudo
chistazo el anterior eh? Un saludo para las numerosas fanáticas que se agolpan
a la puerta de mi casa armadas con piedras enormes. Sin duda querrán construir
puentes de amistad para acercarse a su ídolo.
-Los
partidos se pierden cuando el contrario marca uno o más goles que tu equipo.
Bueno, si lo miramos desde el punto de
vista del contrario, el partido lo habrían ganado, o sea que es una regla
sujeta a distintas interpretaciones y a unos tirantes muy graciosos con dibujitos
de bob esponja.
-Nunca
confíes en un niño/a que te dice que unas botas le van bien. Si el modelo es
del agrado del sujeto en cuestión, es capaz de disimular que se esta quedando
sin circulación, aunque su color de cara empiece a ser moradito tirando a
purple.
-Si
prosiguiera el enchunguecimiento de algunos equipos, en breve tendrá sentido
que nos conozcan más por Vallesca, que rima consonante con Llesca. Y recuerden:
Si, dios no lo quiera, algún día nos diera/diese por asaltar a un proveedor de
centollo salvaje, dejemos la camiseta en casa no sea que acaben arrestando al
vicepresidente, que tan tranquilo está en su casa rodeado de embajadoras del
país del amor.
-Después
de llover salen los caracoles y se esconden los abejoles.
-Cuentan
las crónicas que en campo del Scala Dei se disputó uno de los mejores partidos
de la historia de este santo deporte. Al mando del Estel un míster que marcaría
una época. El resultado final fue 1 a 6 para los negriamarillos. Se dijo que
los rivales eran de edades inferiores a los ganadores, pero eso no quita mérito
a lo que consiguieron esos chavales, sabiamente dirigidos por el único míster con
el 100% de victorias a lo largo de su carrera. Ok que en su carrera sólo ha
entrenado un partido, pero eso qué más dará.
Ese
personaje mítico, amigos y amigas, soy yo.
Me voy
a llorar al váter.
JM
JM... Saps k crec k tinc la prova fotogràfica del teu partit contra l'Scala Dei ????
ResponEliminaMuy bueno!
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